Nuestros queridos amigos y grandes artesanos El Chino y Amaru, gracias a muchos donantes, recibieron un torno eléctrico y motivados por esto…quisieron invertir y seguir creciendo.
Arrancaron la obra para tener su propio taller donde trabajar y armar sus increíbles artesanías.
Solo necesitaban una oportunidad. Un pequeño empujón. Con las ganas que tienen y la garra que le ponen, estamos seguros que van a triunfar.
Desde la Fundación Unir, les mandamos un GRACIAS enorme a todos los que nos ayudan a cumplir sueños.